La cúrcuma, conocida también como azufre de Indias, es una especia milenaria apreciada tanto por sus propiedades culinarias como por los beneficios para la salud que se le atribuyen. Originaria del suroeste de la India, esta planta pertenece a la misma familia que el jengibre. Al rallar y desecar su rizoma, se obtiene un polvo amarillo o naranja que contiene entre un 2% y un 5% de curcumina, el compuesto responsable de muchos de sus efectos beneficiosos. A continuación, exploramos los beneficios, propiedades y el uso de la cúrcuma tanto en la cocina como en la medicina.
Aunque la cúrcuma contiene fibra, proteínas, niacina, vitaminas C, E y K, sodio, potasio, calcio, cobre, hierro, magnesio y zinc, su valor nutricional es escaso debido a las pequeñas cantidades que se utilizan en la cocina. No obstante, cuando se consume en forma de suplemento, su proporción de nutrientes puede ser más significativa.
La curcumina, el principal componente activo de la cúrcuma, ha demostrado reducir la producción de mediadores de la inflamación y los radicales libres, lo que sugiere propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Estas propiedades pueden ser beneficiosas en el tratamiento de diversas condiciones, incluyendo:
La cúrcuma es una especia valiosa tanto en la cocina como en la medicina tradicional, con potenciales beneficios para la salud respaldados por estudios preliminares.
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